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Impecabilidad, Sistema
El propósito de la Escuela de Esencialidad (EdE) es reconectar a sus alumnos con Esencia. Dos elementos importantes para lograr este propósito son el estudio taxonómico y la impecabilidad. Es por esto que ponemos énfasis en el cumplimiento ordenado y oportuno de las acciones. Si no puedes hacer bien las cosas pequeñas, no hay posibilidad de hacer bien —o del todo bien— las grandes. La EdE entrena para obtener poder, para lograr más y mayores objetivos en la vida.
El Sistema de Impecabilidad es un entrenamiento para lograr el poder de producir más y mejores resultados bajo presión de tiempo. Funciona haciendo consciente al alumno de todas sus fallas y del manejo de cada una. Requiere que el alumno asuma una verdadera responsabilidad (acontabilidad con reposición de energía), y esto lo entrena y lo motiva para no fallar.
El Sistema de Impecabilidad demanda que, cuando un alumno tiene una falla de impecabilidad, escriba un reporte y maneje una reposición de energía. Ambos aseguran conciencia plena de la falla y del remedio, y refuerzan el aprendizaje de no seguir cometiendo la misma falla.
Conforme se avanza en los niveles de la Escuela, el gradiente del entrenamiento es cada vez más elevado, expandiendo los límites del poder personal. No manejar un Sistema de Impecabilidad supone el elevado precio de permanecer en la mediocridad. De hecho, si una persona u organización no manejan un Sistema de Impecabilidad, se estancan en la mediocridad durante toda la vida (y así están la mayoría de los seres humanos). Sin un sistema de concienciación y acontabilidad, el ser humano ordinario simplemente no tiene consciencia ni voluntad suficientes para salir de la mediocridad.
El Sistema de Impecabilidad logra que una falla deje de ser una pérdida total en tu vida. Saca algo positivo de la falla aprovechándola para mejorar; se convierte en algo redituable en lugar de algo desgastante al no hacer nada. Cuando fallas y te alineas con un Sistema de Impecabilidad, entonces aprendes rápidamente —y estás muy motivado— a no fallar. En tal caso, has sacado algo provechoso de la falla: entrenarte, excelsiorarte. Y este aprendizaje y crecimiento te sirven para toda la vida.
Fallas y Autoentrenamiento
No son los maestros ni Esencialidad quienes realizan la transformación de tu ser y de tu espiritualidad. Únicamente TÚ puedes hacerlo. Esencialidad sólo te enseña cómo.
Fallar a tu impecabilidad es menospreciar el entrenamiento que estás recibiendo y desperdiciar el TE de tus maestros y de la Escuela —ni hablar de tu propio TE. Si un maestro tiene que invertir TE en cualquier forma para recordarte tus ciclos, aunque sea para enviarte un email, ya has desperdiciado y bajado su TE. Si tú no estás dando tu 100% para mantenerte al corriente en el entrenamiento, por Amor el maestro dejará que sigas a tu propio ritmo y te dará de baja de ese nivel de la Escuela. Bajo las leyes del Amor, el maestro te ama y ama al resto del mundo y va a hacer el MB MN LP. Tiene que maximizar su efectividad y eficiencia para lograr el MB MN LP y los maestros no pueden estar arrastrando a los alumnos. Como sucede en un grupo élite militar: si un elemento no da resultados, está atrasando y bajando la energía del grupo y se le da de baja.
Por todo lo previamente mencionado, el Sistema de Impecabilidad y la acontabilidad son elementos integrales y esenciales de tu entrenamiento. Tu maestro va a aumentar tus ciclos, a exigirte impecabilidad y luego acontabilidad por las fallas. Es tu responsabilidad estar en conciencia de tus fallas y anotarlas en la Bitácora de Impecabilidad (cuando llegas al nivel de alumno) con reporte, reposición de energía y fecha de cierre del ciclo. Si un maestro tiene que intervenir para manejar una falla no manejada por el alumno, habrá una reposición de la falla y una adicional por el TE del maestro.
