Polaridad de la Vida

La Polaridad de la Vida es la observación de que la vida, desde el punto de vista de un ser humano, siempre tiene eventos positivos y eventos negativos (“malos”), experiencias felices y experiencias dolorosas. La naturaleza de la vida es que algunas veces ganas y otras veces pierdes. En cuanto a lo negativo, hay un dicho en inglés: “Shit Happens” (la caca ocurre, significando que las cosas negativas suceden.) Un ser enlightened ya no tiene esa experiencia: no reconoce eventos negativos.

La vida es un desfile de cosas y eventos. Desde el punto de vista de Esencia, la vida no tiene polaridad; todos los eventos son experiencias interesantes y posibilidades de experiencia dentro de la Infinidad de Sí Misma. La Sabiduría sabe y controla todo, y todos los eventos se conjuntan para llevar a la creación al punto al que Esencia quiere llevarla. Nada sucede en contra de la Voluntad Divina, es decir, no hay eventos que no deban ser, que sean negativos.


Sin embargo, dentro de la creación, desde la perspectiva de un avatar con sus gustos y disgustos, deseos y metas, muchos eventos parecen contribuir a sus deseos o están en contra de ellos. Aun como “enlightened”, no sólo tienes un avatar sino también una misión y propósitos. Vas a tener un punto de vista limitado sobre los eventos y algunos te van a parecer negativos, o en contra de tus metas. Esto no importa; lo que importa es tu reacción energética a los eventos.


Una reacción espiritual al menos es de transparencia, de cero energía negativa, de cero resistencia. Por supuesto, todavía mejor es poder ver la perfección. Y sobre todo, saber bien la importancia de no crear NDS (no debe ser) ni de malo.

En la espiritualidad hay varias historias que ilustran la manera en que alucinamos en relación a los eventos. “Qué Bien, Qué Mal, Quién Sabe” es una de ellas. Otra más es la historia del sabio a quien le llevaron un bebé acusándolo de ser el padre. Una tercera es el dicho que afirma: “ Un maestro sólo tiene dos modalidades: 1- disfrute de los positivos, y 2- crecimiento a través de los negativos. Si algo te sirve para crecer, ¿es realmente algo negativo?” De hecho, un verdadero maestro puede apreciar y disfrutar todo, incluyendo a los negativos y hasta al dolor.


La vida no va a dejar de tener mágicamente polaridades en los eventos, sólo por tratarse de una persona “enlightened”. Como reza un dicho Zen: “Antes del “enlightenment”, la vida consiste en cortar madera y cargar agua. Después del “enlightenment”, la vida consiste en cortar madera y cargar agua.” Lo que sí cambia es tu poder de manifestación, y aun así, no sabes cuáles eventos son favorables y cuáles están en contra. Como dice otro refrán: “No hay mal que por bien no venga.”


El sabio sabe que no sabe si un evento es negativo o positivo; sabe que no sabe cómo debe desenvolverse el universo. Lo que sí sabe es que él es el creador de su reacción y sabe que no es sabio estar creando energía negativa. Sabe que estar creando resistencia a la ReLoQECE (Realidad de Lo Que Es Como Es) forma parte de la inmadurez espiritual y es una falla a su impecabilidad energética.

Igualmente, el sabio no se permite ser víctima ni causar lástima; no se queja. Si hay algo que puede hacer para cambiar una situación, lo hace. Si no hay algo, no malgasta su energía con resistencias y quejas. El sabio crea: “Tengo el valor de cambiar lo que puedo; la aceptación de lo que no; y la sabiduría para reconocer la diferencia”. El sabio usa los negativos para crecer, ejercitar su voluntad y su transparencia, y volverse más grande. ¿Qué vas a hacer tú?

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