Solitud
La solitud es el disfrute de estar solo – aunque uno nunca está solo: siempre está Esencia.
No se debe confundir con la soledad, un tipo de tristeza y añoranza por estar lejos del amor. La solitud es una experiencia de plenitud, de estar completo, satisfecho, independientemente de las cosas externas que haya alrededor de uno. La solitud es un estado de serenidad profunda en la que se pueden experimentar una o varias de las características de Esencia y de Pre-Esencia.
La solitud es un remanso de tiempo dedicado a uno mismo, aislado de las exigencias de otros y del mundo. Es un estado de concentración en el propio ser; una especie de meditación y de renovación espiritual. Por ejemplo, las personas van a un retiro, a las montañas o al desierto, o entran a un monasterio para vivir en solitud.
Ambas, soledad y solitud, son experiencias que van más allá del simple aislamiento físico. Puedes estar en medio de una multitud y sentir soledad – o mantener tu solitud.