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Disciplina
En latín, la palabra disciplina significa: aprendizaje, educación. De esta acepción viene la palabra discípulo, es decir, un alumno o aprendiz. Otra acepción del diccionario es un procedimiento o proceso estricto para controlar, entrenar y excelciorarse. Una tercera definición del diccionario, distorsionada del significado original, es castigo; misma que no vamos a usar.
En Esencialidad la definición de disciplina es: capacidad para hacer lo que debes hacer, lo que es lo mejor, cuando debes hacerlo, en la medida de tu capacidad, sin importar qué y si te gusta o no.
Hay una copiosa sabiduría en torno a la disciplina; incluimos algunas frases para reflexionar:
- La disciplina transforma el talento en capacidad.
- Te conviertes en rey cuando eres capaz de gobernarte.
- Paga el precio de la disciplina, o sufre el dolor del fracaso.
- Cuanto más disciplinado eres, más fácil se hace la vida.
- El dolor que sientes hoy es la fuerza que tienes mañana. Empújate a ti mismo, porque nadie más lo va a hacer por ti.
- Sólo hay dos clases de seres: los que tienen resultados y los que tienen excusas.
- El tamaño de tu ser se mide por el tamaño de los obstáculos que te impiden producir resultados. Un ser poderoso vence grandes obstáculos. Un ser pequeño es vencido por pequeños obstáculos.
- La causa principal del fracaso en la vida es la falta de autodisciplina. La disciplina es el puente entre las metas y los logros.
- La autodisciplina es el ingrediente principal de la autoestima.
- La autodisciplina es libertad, la libertad de la mente negativa y de las pasiones. Vivir al efecto de las propias pasiones es la mayor esclavitud.
- Lo que está dentro de nuestro poder hacer, está dentro de nuestro alcance no hacerlo.
- Primero formamos hábitos, luego ellos nos forman. Vence tus malos hábitos o ellos te van a conquistar.
- El carácter nos saca de la cama, el compromiso nos mueve a la acción, y la disciplina nos permite persistir.
La disciplina es parte del poder personal. Es elemental para desarrollar la capacidad de sobreponernos a nuestros obstáculos internos (como flojera, comodidad, mal uso de nuestro TE, etc.), y para producir los resultados deseados sin importar los obstáculos que se presenten. La disciplina es el poder personal de hacer lo que uno debe hacer, cuando debe hacerlo, al 100% de la propia capacidad, le guste o no al ego.
Una persona disciplinada hace lo que ha determinado que es mejor: busca la excelencia. Una persona indisciplinada hace lo que le es más fácil y cómodo. El mayor obstáculo que existe en la vida para lograr lo que nos proponemos, somos nosotros mismos, nuestra falta de disciplina.
El propósito de la disciplina es FORJAR la EXCELENCIA. Con la práctica tanto la disciplina como la excelencia se vuelven hábitos, pero hasta este punto se requiere Voluntad, Compromiso y Esfuerzo.
Hacemos hoy lo que otros rehusan, para que mañana podamos hacer lo que otros no pueden.
Comparación de comportamientos
Pagar el precio
La vida es un constante sacrificio de lo placentero o lo cómodo para hacer lo difícil que nos lleva a lo valioso a largo plazo.
La vida de excelencia es un constante sobreponerse a la flojera y la indisciplina para esforzarnos a actuar y producir los resultados que en su momento van a beneficiar tanto a nosotros mismos como a otros.
En la vida, siempre pagas un precio. Puedes pagar el precio del éxito poco a poco, día a día, en abonos con disciplina, o puedes pagar el precio casi siempre catastrófico de fracasar, por ejemplo en la salud. Lo que no puedes hacer es evitar pagar el precio de tu acción o inacción.
Una de las diferencias entre un niño y un adulto, un componente básico de la madurez, es la capacidad de posponer el impulso de una gratificación instantánea de la comodidad, para hacer lo necesario. Esto es disciplina.
Lo opuesto a la disciplina es vivir de manera salvaje, al efecto de la flojera, de las emociones y de las activaciones. Es vivir sin plan, sin terminar las cosas que iniciamos, sin seguir un rumbo definido, sin hacer lo que sabemos que sería lo mejor a largo plazo. Sin disciplina, no llegamos a nada.
La disciplina entre los miembros de un grupo es también el conjunto y alineamiento de sus fuerzas, lo que los potenciará para lograr grandes y complejas actividades y objetivos. Por ejemplo, la milicia no podría existir sin disciplina. ¿Qué pasaría si cada soldado hiciera lo que le diera la gana cuando le diera la gana? ¿Podría la milicia cumplir sus propósitos y misión? Ninguna persona ni organización ha alcanzado jamás la excelencia y el éxito sin ser disciplinada de alguna manera.
La disciplina es una forma de Amor. Una de las definiciones del amor es aquello que aumenta el bienestar de lo que amamos. Por ejemplo, si decidimos estudiar, hacer dieta o ejercicio para aumentar nuestro bienestar, estamos amándonos a nosotros mismos a través de disciplinarnos. Igualmente, cuando disciplinamos a nuestros hijos, estamos tratando de enseñarles y mejorarlos y eso es amarlos. Cuando les enseñamos disciplina y a ser disciplinados, les estamos enseñando cómo ser personas de poder, calidad y éxito, y esto también es amor en acción. No podrás alcanzar la excelencia en lo que eres y haces sin disciplina; tampoco podrás alcanzar tus metas. La disciplina es uno de los secretos del éxito.