Promesa de tiempo

Cuando abres un ciclo siempre debes hacer una promesa de tiempo de cuándo vas a tener ese ciclo cerrado y  lo anotas. Incluso si abres un ciclo personal date a ti mismo una promesa de tiempo. Cuando no hay una promesa de tiempo, no hay responsabilidad y acontabilidad verdadera y será poco el poder personal. Sin embargo, no se ve esto porque los ciclos parecen “en progreso” cuando deben haber sido cerrados. Únicamente cuando hay una promesa de tiempo puedes saber si vas bien o no en tus ciclos y tu poder personal.

Si te encuentras no cumpliendo muchas de tus promesas de tiempo, es también un problema de poder. No estás manejando tus ciclos bien, o estás aceptando demasiados ciclos, o no estás cerrando ciclos. Hay que analizar la causa y tomar acción para remediar lo que está causando que no cumplas tus promesas de tiempo.

Haz de las promesas de tiempo un hábito en tu vida. Esto naturalmente te dará más poder personal, más orden y tranquilidad. Es decir, hacer de las promesas de tiempo un hábito en tu vida, te resta obstáculos, desorden y dramas.

En la EdE es imperativo operar bajo este sistema de promesas de tiempo.