Autoestima, crónica y aguda

Tienes dos niveles o estados de autoestima: uno básico o crónico, y otro intenso o agudo.

Tu nivel básico o crónico es el estado normal y habitual de tu experiencia. Es la manera en que te sientes generalmente en la vida diaria. Es tu estado normal de SER-SENTIR cuando no estás activado positiva ni negativamente. Es tu sentir = experiencia diaria normal, la mayor parte del tiempo, por nada en particular. Realmente se trata de tu nivel de autoamor = amor propio.

Para algunas personas este estado es ligeramente positivo: están en interés e incluso en entusiasmo por lo que sucede en la vida. Dicho estado es de autoestima positiva, resultante de un sentimiento de control de la vida, de Poder hacerse cargo de sí mismo en la vida. Tal sentimiento proviene de vivir en las IDs(+) = RIPs de Poder y Valía.

Para otras personas, el estado básico o general en su SENTIR es negativo: preocupación, ansiedad, y tal vez algo de pesimismo. Tal autoestima negativa se debe al sentimiento de incapacidad para controlar la vida y alcanzar metas. Esas personas tienen a flote algunas IDs(-) = RINes de Anti-Poder y de +Anti-Valía.

Para muchos otros, el nivel crónico o básico en el SENTIR es más o menos neutral: de calma, tranquilidad: ni entusiasmo ni ansiedad.

Cualquiera que sea el nivel de tu estado crónico, positivo, negativo o neutral, tu experiencia básica en la vida es la experiencia de ti mismo, de tu nivel de (auto)amor.

El segundo nivel o intensidad de la experiencia de autoestima ocurre cuando estás activado. Las activaciones = cargas emocionales son “ataques” de baja autoestima intensificada. Tus cargas emocionales son tu autoestima aguda del momento. Los momentos de entusiasmo y alegría son activaciones de autoestima positiva. Los momentos de enojo, miedo, tristeza y depresión son activaciones de autoestima negativa.