Integridad

Integridad es una característica de la espiritualidad, uno de los Principios Universales del Amor. Íntegro es ser uno, entero, y así es Esencia. No puede ser otra cosa: Esencia es la Sabiduría y Conciencia Infinitas. Sabe todo; nada hay escondido ni desconocido. Ser íntegro es ser uno en tu Pensar, Decir y Hacer.

La integridad es el alineamiento, como muestra el lado izquierdo de la imagen; entre lo que piensas, dices y haces. La no integridad es separación, diferencia, entre pensar, decir y hacer, como muestra el lado derecho de la imagen.

La integridad incluye:

• Cumplir tu palabra y las promesas que haces.
• Puntualidad.
• Cumplir tus deberes y responsabilidades.
• Pagar los préstamos a tiempo, sin que te busquen.
• Sinceridad.
• Honestidad.
• Ser justo en tus tratos.

La integridad es esencial para:

• El amor: la no integridad es dar energía negativa a otros.
• La autoestima; no te respetas a ti mismo si no cumples tu palabra, si no eres honesto.
• El respeto de otros; no cumplir tu palabra hace que otros te pierdan el respeto, por no ser confiable.
• Las buenas relaciones humanas; por ejemplo, la impuntualidad causa que otros no hagan negocios contigo.
• El poder personal. Si no puedes cumplir tu palabra; no esperes que el universo te haga caso.
• El liderazgo. La gente no sigue a una persona en quien no confía.

¿Cómo te sientes con las personas que no-son íntegras, que no cumplen su palabra, que rompen sus promesas y no realizan sus deberes, que son impuntuales, mienten, son ventajosas y roban? Así es como los otros se sienten contigo cuando no eres íntegro. Así es como tú te sientes contigo mismo cuando no tienes integridad.

Las fallas en integridad son energía negativa, amor negativo. Causan pérdidas de TE, problemas, no resultados y fracaso. Tu compromiso con la espiritualidad es volver a ser Amor; y no puedes serlo dando amor negativo. Ser amoroso, ser espiritual, requiere que seas íntegro.

Un pilar es una persona confiable. Hace lo que dice cuando lo dice. Es responsable; produce resultados. Asume grandes responsabilidades y soporta grandes pesos. Una persona espagueti es todo lo opuesto. No cumple su palabra; no es confiable para producir resultados. Las personas pilares son muy valiosas en el mundo; las empresas importantes las aprecian y las recompensan. Escalan rápidamente a posiciones de responsabilidad y liderazgo.

Cuando tienes una falla de integridad, es tu responsabilidad reconocerla y ser acontable. Ser acontable significa reponer la energía cuando has causado una baja o pérdida de la misma. Es restaurar el amor a una situación, objeto o persona, y a ti mismo.

Ya eres consciente de tu integridad en relación a otros, de cumplir tu palabra, estar a tiempo, etc. Ya sabes que la integridad es de muchísima importancia para tu autoestima y para lograr la estima y respeto de los demás. Ya comprendes que es una falla a tu propio amor y poder personal no cumplir tu palabra.

De igual importancia es la integridad contigo mismo.

Tu voluntad es tu fuerza creadora. Tu palabra es la expresión de tu voluntad. Tu palabra creadora declara que algo va a ser, que algo vas a hacer. Pero tu palabra creadora solo tiene el poder que tú le des. El universo obedece a tu voluntad (palabra) en la medida en que tú la obedeces. Si declaras que vas a hacer algo y no lo cumples, le estás mostrando al universo y a ti mismo que tu voluntad-palabra no importa, que no tienen poder ni siquiera sobre ti mismo. Si tú no respetas tu voluntad, ¿cómo puedes esperar que el universo lo respete cuando quieras manifestar algo?

Solamente hay dos caminos: cada vez que cumples tu palabra te haces más fuerte y poderoso. Cada vez que no cumples tu palabra te debilitas, pierdes poder.

Un ejemplo de esto son tus disciplinas. Si declaras que las vas a hacer impecablemente y no las haces, te encuentras en el segundo camino.

Otro ejemplo son las Promesas de Tiempo para cerrar ciclos. De vez en cuando puede suceder que no cumplas una por causas de fuerza mayor, pero si tienes un patrón de incumplimiento, eso quebranta tu poder personal y te lanza a un tobogán descendente por el segundo camino.

ES MEJOR DECLARAR QUE NO VAS A HACER ALGO, QUE DECLARAR QUE LO VAS A HACER Y NO LO HACES. El primer caso supone solo una falla, el fracaso de no obtener un resultado. El segundo es algo peor: no solo no obtienes un resultado, sino que tampoco respetas tu voluntad y te debilitas. Estás cayendo cuesta abajo en el segundo camino.